lunes, 24 de abril de 2017


EL JUEGO COMO ARTICULADOR


Briglia, Julieta (Lic. en Terapia Ocupacional); Fuertes, Laura (Lic. Kinesióloga fisiatra); Nowotny, Alexia (Psiquiatra Infanto-juvenil); Rodríguez, Lorena (Lic. en Psicopedagogía). 

Centro de Salud y Acción comunitaria Nº 9. Hospital Argerich

Palabras claves: Juego articulador - sala de espera – centro de salud – trabajo vincular

Introducción

El Centro de Salud y Acción Comunitaria N°9 (CESAC 9) está ubicado en Irala 1254, barrio de La Boca y depende del Área Programática del Hospital Argerich. Las actividades que se desarrollan desde el primer nivel de atención se organizan en programas interdisciplinarios, que permiten la evaluación, asistencia y/o seguimiento de familias y colectivos del barrio; así como también espacios disciplinarios. El abordaje intersectorial y territorial resultan imprescindibles para “el cuidado integral de la salud de la población del Área Programática del Centro de Salud, teniendo en cuenta tanto los lineamientos de la Ley Básica de Salud y la concepción y estrategias de Salud del Equipo Interdisciplinario, como las valoraciones y expectativas de la población respecto a su propia salud y a la Institución”1.

La perspectiva de la promoción de la salud, implica una agenda basada en los determinantes de la salud, y en las condiciones de ejercicio de poder2. Es por ello que desde los espacios de intervención en sala de espera, apostamos a un acercamiento a las problemáticas sociales complejas desde la promoción del ejercicio de la ciudadanía3 de las familias que habitan el barrio.

Asimismo, el trabajo preventivo-promocional realizado desde este efector de salud, favorece el acceso a otros dominios sociales y culturales. Por ello se trabaja con recursos como la lectura, el juego, las actividades artísticas, entre otras, que abren posibilidades para la invención, la estética y el acceso y uso de algunos bienes culturales.

El objetivo del presente trabajo es describir el espacio abierto de juego que funciona en la sala de espera del CeSAC N°9 los días viernes por la mañana, donde asisten niños de diferentes edades.

El barrio de La Boca

El barrio se encuentra atravesando un proceso de “gentrificación”4, es decir, una reconversión de la configuración social con el fin de cambiar su perfil y atraer a pobladores de alto poder adquisitivo, provocando la expulsión y desplazamiento de sus históricos habitantes (por encarecimiento de viviendas, servicios públicos, alimentos, etc.) Este proceso trae consecuencias violentas –desalojos compulsivos, conflictos sociales - incertidumbre, y precariedad habitacional.

Aproximadamente el 20% de la población en el barrio tiene las necesidades básicas insatisfechas y son elevados los índices de morbi-mortalidad. Esta población se caracteriza además por tener un bajo nivel de escolaridad, precarización del empleo, subocupación o desempleo y condiciones ambientales deficientes -inadecuado acceso a bienes y servicios, contaminación ambiental, plagas, déficit de cloacas y agua corriente5.

Específicamente basándonos en la población infantil, en la Ciudad de Buenos Aires: tres de cada diez niños/as pobres de entre 3 y 4 años, no van al Jardín y uno de cada cuatro niños/as menores de 4 años de edad carece de cobertura de salud –sea privada o por Obra Social-, mientras que en el caso de niños/as pobres dicho número asciende a seis de cada diez6.

Desarrollo

El juego y el desarrollo en la niñez

El juego es una actividad fundamental para el desarrollo del niño/a y un elemento esencial en su socialización7. Es además un reflejo de la vida interior del niño, originando gozo, placer, satisfacción consigo mismo8. El juego contiene por sí solo todas las posibilidades de transición entre la imaginación creadora y el hacer constructivo9 creando un tiempo y un espacio de libertad.

Su práctica contribuye al desarrollo social y afectivo de la personalidad y fomenta la adquisición de actitudes, valores y normas, a la vez que es el medio ideal para la adquisición de habilidades corporales, como son la percepción auditiva, la orientación espacial, la percepción de formas espaciales, la expresión corporal, la motricidad fina, etc.

Sin duda, la conducta motriz integra elementos cognitivos, afectivos y motorices, y nos muestra al niño al desnudo, tal como es, desplegando sus extraordinarias potencialidades de perfección, las que paulatinamente actualizará a través del proceso de enseñanza-aprendizaje, en el que el juego actúa como instrumento y fin.

El juego motor será el principal medio para alcanzar los logros motores, ya que en él se concilian acción, pensamiento y lenguaje10, acción, símbolo y regla11 e integración. Porque el juego permite construir de manera integral funciones tan importantes como el tono, el equilibrio, la lateralidad y las conductas perceptivo-motrices, a la vez que conocer y adaptarse al medio físico y social.

…Un lugar para articular, crear y recrear, para dejar volar la imaginación…

Desde hace unos años el espacio de juego en sala de espera es un lugar privilegiado para chicos y grandes, valorado y respetado.

En sus comienzos, se disponía la sala de espera con pequeñas mesas y sillas ordenadas con diferentes ofertas de juegos y juguetes. El rincón de la cocina por un lado, los autitos y la herramientas por otro, los ladrillitos de construcción y los juegos reglados. Disfraces, calzado y bijouterie estaban al alcance de todo aquel que quisiera por un ratito ser princesa o súper héroe.

Los días viernes, un equipo interdisciplinario de profesionales del CeSAC, convocaba a jugar a todo aquel que quisiera, algunos mientras esperaban ser atendidos y otros, que habían descubierto ese mundo y sólo venían a jugar por jugar.

La espera era más corta y la actitud ante la consulta era más favorecedora. Los niños podían volver a jugar mientras los pediatras ultimaban las indicaciones de las consultas con las familias. Las mamás podían acceder a su turno programado y plantear todas sus inquietudes con la tranquilidad de que sus niños jugaban en aquel lugar.

Con el transcurrir del tiempo, se fueron generando  cambios en el espacio de juego.

Hoy, podemos enumerar diferentes aspectos que se han ganado en estos años.

-El trabajo con los padres: se los convoca a jugar con sus hijos. Hombres y mujeres pueden intercambiar momentos de juego con sus niños.  A veces profundizando dicha experiencia y en otras ocasiones, acompañándolos a descubrir ese nuevo mundo. Permitir y permitirse jugar con juguetes que se vinculan culturalmente más con el sexo opuesto.

Asesorar y orientar sobre la crianza, desarrollo, alimentación, lenguaje, asesoramiento escolar, favorecer el acceso a la salud.

Detección de situaciones problemáticas que ameritan una consulta con el especialista o abren la oportunidad de abordarlas en ese momento.

-Jugar con pares: algunos niños tienen la oportunidad de compartir con otros niños un espacio recreativo en la sala de espera. Generalmente no asisten a instituciones escolares. Otros, inauguran nuevos encuentros con pares.

Aquí se favorece el intercambio, la comunicación oral y el lenguaje corporal, la espera, el compartir, el cooperar.

-Incorporación de adolescentes: Se contactó con una Escuela Pública de la zona, para la apertura de un espacio donde puedan concurrir alumnos de 4° año, a fin de realizar un proceso de pasantía. Los alumnos que están interesados se inscriben y por grupos de 6/7 adolescentes van pasando por dicha experiencia.

Este proceso consta de aproximadamente 6 encuentros, 3 teóricos (donde se trabajan los conceptos de salud, promoción, prevención, derecho, juego, entre otros) y 3 prácticos donde los mismos adolescentes son los que co-coordinan el espacio de juego con la supervisión de un profesional de planta del CeSAC.

En esta experiencia puede observarse como este grupo etario, poco a poco va apropiándose del espacio y transitando por el centro de salud como su lugar de pertenencia. Ellos mismos terminan siendo promotores de salud, replicando experiencias por los diferentes lugares por donde transitan.

Solicitan asesoramiento, turnos, controles, participan en charlas informativas, etc.

Al final del curso se les extiende un certificado de concurrencia avalado por las Instituciones Salud y Educación.

-Espacio físico: se continúa conservando aquel lugar pequeño de la sala de espera pero con la particularidad de que actualmente, aparte de las mesitas, se ha incorporado un espacio con colchonetas.

Este lugar es facilitador para el juego de mamás y sus bebés,  como así también por niños más grandes que desean jugar, como un lugar que permite el despliegue corporal.

-Articulación con otros espacios/programas del CeSAC: Año tras año se organiza alguna  jornada de intercambio entre Juegoteca y el Programa de Adultos Mayores.

Generalmente suele ser para el día del niño o para el día del derecho al juego.

Las abuelas preparan en sus talleres de los días lunes pequeños regalitos para los niños, participan de la construcción de juegos junto con los niños del barrio el día del festejo, comparten una película y la merienda, entre otras cosas.

Se genera un clima cálido, comparten experiencias de su infancia, relatan su paso por la escuela y muchas veces, sus experiencias como abuelas de sus propios nietos.

Otro programa que también articula con el de Juego, es la entrega de leche (Programa Materno-Infantil).

En el mismo día y horarios se realiza  la apertura de estos dos espacios. De esta manera, los mismos beneficiarios de la entrega de la leche pueden participar del juego.

Los profesionales que coordinan ambos espacios pueden trabajar conjuntamente. Siendo no sólo la entrega de leche en sí misma, sino también habilitando el trabajo con la familia, el acercamiento, asesorando, brindando información, etc.

Escenas y lecturas del juego en sala de espera

En el contexto donde estamos insertas, podemos leer y percibir las situaciones interdisciplinariamente. Es nuestra intención compartir algunas escenas que acontecen en el espacio de juego en sala de espera.
Los niños suelen llegar a la sala de espera en compañía de sus padres, y en ocasiones de hermanos. Muchas veces el espacio se convierte por sorpresa en un lugar de encuentro con compañeros del colegio, vecinos y amigos del barrio.

Algunos llegan por primera vez, observan a la distancia con curiosidad, consultan a sus padres, se acercan despacito. Otros chicos ya conocen el lugar y lo toman inmediatamente, desaparece el contexto sala de espera: los turnos, el fastidio de esperar, el apuro de los padres. Es así como entran –entramos- en una nueva dimensión de juego: el espacio y el tiempo parecen transformarse por un rato.

Muchas veces los padres se quedan cerca, otras los invitamos a acercarse o sus hijos los invitan a jugar, les acercan los juguetes, les piden que les lean un libro.  Otras veces las ocupaciones y obligaciones que tienen los padres se convierten en obstáculos para que puedan compartir momentos recreativos con sus hijos, ayudando este espacio de juego a habilitar ese tiempo de espera para la atención como un momento de disfrute para compartir. En algunos casos, los padres consideran que no es relevante participar de instantes de juego y entonces se puede intervenir y trabajar con esa situación en acto.

Se juegan carreras de autos, algún chico prepara la comidita para todos, o se arma una competencia de aviones de rasti. Entre juego y juego, se comparte. Los niños y las niñas van aprendiendo a encontrarse entre ellos y surgen conflictos, enojos que se pueden pensar entre todos y proponer soluciones. También surgen besos y abrazos de encuentro con algún vecino, amigo del barrio  o compañero de escuela. El espacio se transforma ahora en un encuentro de amigos.

La charla acompaña al juego, el relato se hace presente de inmediato, la forma de hablar es algunas veces difícil de entender para los demás, algún hermano ayuda, el grupo presta atención a lo que se dice. El niño insiste, y en este esfuerzo de todos, las palabras van tomando forma.

Los más grandes cuidan de los más chiquitos que circulan por el espacio, los hermanos mayores atentos a los pequeños. Mientras, todos jugamos.

Reflexiones finales. Un lugar donde ser niños

Consideramos que el juego es esencial para la construcción de la subjetividad del/a niño/a. De tal modo, el juego es participar, vincularse, expresarse, crear y deshacer, transformar y transformarse12. Como profesionales de la salud, hacemos énfasis en la función articuladora del juego. Como promotor de la salud, es pensado como medio y como fin, apostando a la participación de las familias en la comunidad, la promoción de su ciudadanía, el desarrollo integral infantil, y la detección precoz de signos de alarma y distintas situaciones problemáticas, posibilitando, en caso de ser necesaria, la interconsulta oportuna. Apostamos a la oferta de un espacio y un tiempo donde articular recursos, tejer una trama vincular, consultar y compartir experiencias, transformando la espera pasiva de un turno en una participación activa de la población que asiste al CeSAC.

En este otro espacio-tiempo que se constituye en la sala de espera, se permite experimentar, explorar, crear, intervenir en un espacio que es público, pero que puede permitir cierta apropiación. Se inventa un tiempo para un trabajo con otros, pares y adultos, donde se constata la propia existencia13y se permite el acceso a bienes culturales. A veces surgen comentarios, dudas, se barajan explicaciones, hipótesis, se abren consultas, preguntas que permiten desarmar algunos modos habituales de lidiar con algunas situaciones cotidianas. Por esto, lo que allí surge no debe ni puede ser respondido por la coordinación, sino que, desde una función de enlace, debemos facilitar el vínculo con otros recursos –del barrio, de experiencias de las mamás que participan, etc.- posibilitando situaciones de intersubjetividad.

Asumir los desafíos ético-políticos que se nos presentan cotidianamente haría posible “no sólo resistir sino también inventar, desde potencias deseantes, formas cada vez más libres de amar, de trabajar, de estar, de pensar14.



Referencias Bibliográficas:

1-     CeSAC N° 9. Un equipo de salud, un barrio, una historia. Cuadernillo Institucional 2015

2-     Restrepo H. Conceptos y definiciones. En: Restrepo H, Málaga H. Promoción de la salud: Cómo construir vida saludable. Bogotá: Editorial Médica Panamericana, 2001. p 28-32.

3-     Carman M. Janoschka, M. Presentación del dossier. Ciudades en disputa: Estudios urbanos críticos sobre conflictos y resistencias. En: QUID 16 Revista del Área de Estudios Urbanos Instituto de Investigaciones Gino Germani, 2014, no. 4, p 1-7.

4-     Salinas Arreortua L. Gentrificación en la ciudad latinoamericana. El caso de Buenos Aires y Ciudad de México. En: GeoGraphos. [En línea]. febrero 2013, vol. 4, no. 44, p. 283- 307. [ISSN: 2173-1276] [DL: A 371-2013] [DOI: 10.14198/GEOGRA2013.4.44].

5-     Dirección General de Organización, Métodos y Estadística. Subsecretaría de Sistemas de Información G.C.B.A. Anuario Estadístico de la Ciudad de Buenos Aires, 2011. Y según relevamientos realizados por Cesac n°9.

6-     Ministerio Público Tutelar y CELS, Infantilización del déficit habitacional: una temática invisible: informe de actualización, 1ra. Ed., Ciudad de Buenos Aires, Eudeba, 2013, p. 21.

7-     Zúgaro R. Guía para la enseñanza de las danzas folklóricas en la escuela primaria. En: La Obra, 1992. p 32

8-     Froebel F. La educación del hombre. Madrid. Ed. del Jorro. 1913. P 29.

9-     Piaget J. La formación del símbolo en el niño. México: Fondo de Cultura Económica. 1986

10-  Bruner J. El desarrollo del niño. Madrid. Morata. 1979

11-  Piaget J. La Naissance de l´intelligence chez l´enfant. Neuchâtel: Delachaux et Niestlé. 1936

12-  Decreto N° 1436/05 CABA

13-  Percia M. Una subjetividad que se inventa. Lugar Editorial. 1994

14-  Fernández A. Desigualados. Diario Página 12 Jueves 24 de diciembre de 2009 Disponible en: http://www.pagina12.com.ar/diario/psicologia/9-137532-2009-12-24.html





lunes, 17 de abril de 2017


JUEGOTECA EN EL ÁMBITO DE LA SALUD PÚBLICA

CON UNA MIRADA PSICOPEDAGÓGICA



Lic. Eliana Martinez Rivero- Psicopedagoga - Lic. Andrea Mokaniuk-Psicopedagoga

Centro de Salud y Acción Comunitaria Nº13- Hospital Gral de Agudos “Dr. P. Piñero





Palabras claves: Juego reglado – APS – Aprendizaje – Psicopedagogía





“La juegoteca es sencilla, la juegoteca es compleja, la Juegoteca es red en acción,

La Juegoteca son los niños jugando y divirtiéndose (es decir, siendo niños),

Es promoción, es intersectorialidad, es canal de participación, es detección temprana,

es cabalmente Salud Mental”.

Lic. Eduardo Tissera



La juegoteca de juegos reglados es un dispositivo que funciona en el Centro de Salud y Acción comunitaria Nª13, ubicado en Parque Avellaneda. Es llevado a cabo por el Equipo de Psicopedagogía que, partiendo de una concepción integral de la salud, ideó un espacio de prevención y promoción que rescata al juego, en tanto constitutivo del ser y pensar.

Este espacio es coordinado por dos psicopedagogas y está dirigido a niños entre 5 y 12 años, los cuales pueden concurrir ya sea en forma espontánea, por derivación de la escuela o por derivación de alguno de los profesionales del centro de salud. Una de las condiciones para asistir, es una breve entrevista con los padres, en donde se le toman los datos formales y se aclara el encuadre del espacio y sus características.

Los objetivos Generales que se plantean para ésta juegoteca de juegos reglados son:



~        Promover la salud y el desarrollo de los niños a través de una mirada preventivo-promocional.

~        Estimular la estructuración afectiva y cognitiva, abriendo espacios de juego como recurso de aprendizaje y sociabilización.

~        Trabajar la tolerancia a la frustración y aceptación de las normas.

~        Generar un espacio de acceso y contacto con diferentes y variados juegos reglados.

~        Defender el Derecho del niño al juego.



En cuanto a este último objetivo, Este espacio de Juegoteca se encuentra enmarcado en la “Ley De Protección Integral De Los Derechos De Las Niñas, Niños Y Adolescentes” y en la “Convención sobre los Derechos del Niño”, que al respecto, en su Artículo 31 establece: “Los Estados partes reconocen el derecho del niño al descanso y el esparcimiento, al juego y a las actividades recreativas propias de su edad, y a participar libremente en la vida cultural y en las artes”. Señalando también que “propiciarán oportunidades apropiadas, en condiciones de igualdad”

¿Por qué una juegoteca en un Centro de Salud?

El trabajo desde un centro de salud permite, tener un contacto más directo con la comunidad, dado que es “el primer nivel de contacto entre ésta y el sistema de salud.La juegoteca comunitaria CREA, Centro Recreativo de Estimulación del Aprendizaje, es un espacio llevado a cabo por el equipo de psicopedagogía y se sustentada en el Programa CentralJuegotecas en Salud del Ministerio de Salud del GCABA.

La juegoteca entonces, en este contexto, es concebida como un espacio de promoción de la salud, tendiente a mejorar la calidad de vida rescatando los espacios de juego y ofreciendo un lugar permanente y accesible a todos los niños. Sostenida en el supuesto de que en función de una situación grupal y lúdica, se favorecen los recursos cognitivos de los niños, especialmente en aquellos que no acceden ni habían accedido previamente a los juegos reglados.

Un objetivo que nos proponemos, tiendo en cuenta los lineamientos que se plantea la APS como estrategia de salud, es poder acercar a la comunidad los juegos reglados, achicando la brecha entre los niños que tienen acceso de los que no tienen acceso a este tipo de juegos.

Al tiempo que nos permite constituirnos en referentes de salud para las familias y detectar posibles riesgos y prevenir, realizando la derivación adecuada y orientando a los padres respecto de sus inquietudes.

¿Por qué  elegimos trabajar con Juegos reglados?

Elegimos construir y habilitar un espacio de  juego porque entendemos, por un lado, que la posición del niño al jugar está imbricada con su posición en el aprendizaje; y por otro, porque actúa como promotor del desarrollo socio-cognitivo y posibilita la toma conciencia de los propios procesos de pensamiento.

Optamos por trabajar con los juegos reglados, porque plantean condiciones de juego a respetar, que funcionan como marco para el despliegue de determinadas estrategias. El niño se propone un objetivo claro para el cual seleccionara y pondrá en práctica acciones, modificándolas a partir del feed-back que la situación le devuelve.

Cuando se toma distancia de la acción, se puede pensar en cuáles han sido las estrategias implementadas, cuáles los resultados y cuáles son las modificaciones necesarias para evitar el error y conseguir un resultado exitoso. Esta toma de consciencia del propio hacer, posibilitaría apropiarse de aquellos aprendizajes surgidos de la situación lúdica.

Al mismo tiempo, el juego reglado presenta un equilibrio sutil entre la asimilación al yo (principio de todo juego) y la vida social, favoreciendo el desarrollo de la moral en el niño.

Las reglas aparecen como una terceridad que permitiría tomar conciencia de, la existencia de una ley exógena que está más allá de los sujetos; de un “otro” que tiene una existencia diferenciada. De modo tal que contribuyen a la descentración del pensamiento abriendo paso a la comunicación y al surgimiento de distintas estrategias de resolución y abordaje de las situaciones lúdicas.

Desde el punto de vista de la interacción, las reglas aseguran el afianzamiento de los tiempos de espera, la frustración por el objetivo no logrado, la aceptación de que ello es posible, pero también asegura la posibilidad de volver a intentarlo con éxito. “En el caso de un juego como oportunidad de aprendizaje, aprender puede significar volver a jugar muchas veces al mismo juego”2

Por otro lado, en el espacio de Juegoteca los niños se encuentran con otros niños con los cuales deben interactuar. Por lo cual, además de la situación lúdica se les presenta el desafío de jugar con sus pares y construir conocimientos en el marco de una situación grupal de entretenimiento.

¿Cuál es nuestro rol como psicopedagogas al coordinar este espacio?

Fundamentalmente, coordinar este espacio implica poder brindar las condiciones necesarias para que el juego se desarrolle.

Para ello consideramos esencial el Acompañar a los niños, ya sea en la selección del material ofreciendo el más adecuado en relación a la edad del niño y la complejidad del juego; identificando obstáculos y ayudando a sortearlos, para que el juego avance;  facilitando la tolerancia a la frustración, promoviendo la iniciativa, disolviendo estereotipias y favoreciendo el uso de nuevas estrategias de acción en cada situación lúdica.

Posicionadas desde un lugar que considera al error como posibilitador de aprendizajes y generador de conflictos, para los que requeriránimplementar nuevas estrategias y formas novedosas de resolución. Nuestro rol también estará orientado a brindar propuestas más complejas en busca de situaciones que pongan a los niños a preguntarse “cómo hacer” para que, desde allí, puedan plantearse nuevas situaciones y formas de resolución.

Teniendo en cuenta que el aprendizaje siempre es con otro, nuestro objetivo es que este “cómo hacer” pueda ser socializado, de modo que parte de nuestro rol es también posibilitar los intercambio entre pares, a fin de lograr una mayor descentración.

Finalmente, intentamos dar lugar a la posibilidad de que el niño pueda volver sobre su propio hacer y sus acciones, con una mirada crítica, buscando favorecer el pensamiento autónomo e independiente.



Referencias

1-    Núcleos de Aprendizajes Prioritarios. Serie de Cuadernos para el Aula. Nivel Inicial. Volumen 2: Números en Juego-Zona Fantástica.

2-    Comité Central del programa de Salud Escolar; 1989:



Bibliografía

-          Boletín Red Juegotecas en Salud. Volumen 1, numero 1.

-          Convención sobre los Derechos del Niño. Asamblea general de Naciones Unidas. Noviembre 1989.

-          Conferencia internacional sobre la Atención Primaria en Salud de Alma Ata. 1978

-          Ley 26.061:“Ley De Protección Integral De Los Derechos De Las Niñas, Niños Y Adolescentes”

-          Núcleos de Aprendizajes Prioritarios. Serie de Cuadernos para el Aula. Nivel Inicial. Volumen 2: Números en Juego-Zona Fantástica.

-          Programa de Juegotecas en Salud 2008. Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Ministerio de Salud. Direccion General Adjunta de Programas Centrales.

-          Radrizzani Goñi, Ana Maria; Gonzalez, Ana “El niño y el Juego. Las operaciones infralogicas espaciales y el juego reglado” Editorial Catari. Buenos Aires. 1988

lunes, 13 de marzo de 2017



SALUD EN EL BOCHINCHE

Autores: De Domini, Lucía María (Lic. en Psicopedagogía)-Demarchi, Paula María (Lic. en Psicología)-Ferreyra, Natalia (Lic. en Psicopedagogía)-Real, Julia (Lic. en Psicología)

Institución: CeSAC Nº 10 (Área programática Hospital Penna)


Palabras Claves: Jugar por jugar, alojamiento, contexto, puerta de entrada.



Abstract:

El presente trabajo relata nuestra experiencia en el espacio de Juegoteca “Bochinche Otra Vez”, llevada a cabo en el Centro de Salud y Acción Comunitaria nº 10 perteneciente al Área Programática del Hospital J.M. Penna.

Mediante un breve relato de nuestra experiencia realizaremos una descripción del dispositivo de Juegoteca y Beboteca, aludiendo también a la historia de este espacio dentro del Centro. Asimismo, enmarcaremos este programa dentro de los lineamientos de la Atención Primaria de la Salud, poniendo particular énfasis en la relevancia que este espacio adquiere en el barrio, debido a sus características poblacionales y habitacionales.

Intentaremos relatar nuestra posición respecto a la noción de juego, la cual orienta nuestro modo de pensar el dispositivo, revalorizando la importancia del juego en cada etapa de la vida, tanto en los niños que acuden al espacio, sus familias y los juegotecarios.



Salud en el Bochinche

Cada miércoles a las 10 de la mañana, se abren las puertas de la Juegoteca en el salón de usos múltiples (SUM) del Centro de Salud y Acción Comunitaria (CeSAC) N° 10. Nosotras, cuatro ingresantes al Centro, dos Concurrentes de Psicología Clínica y dos Residentes de Psicopedagogía comenzando nuestro paso por el sistema de salud pública fuimos convocadas para participar de la Juegoteca “Bochinche Otra Vez”, acercándonos así un primer trabajo con la comunidad.

En otras palabras, fuimos invitadas a ser juegotecarias y a proponer un espacio de juego para la población. Este nuevo rol nos invitaba a esperar del otro lado de la puerta a niños y niñas, acompañarlos en el despliegue de sus historias y mundos fantásticos, a construir juntos, a encontrarnos y reconocernos jugando con ellos, participando de sus juegos.

A lo largo de este escrito, quisiéramos transmitirles nuestra experiencia y recorrido en la Juegoteca del CeSAC, la cual tiene una historia tan rica como los múltiples mundos de fantasía que se desarrollan en ella cada miércoles, una historia que no podemos dejar de mencionar para comprender su creación y lo que en el espacio sucede.  Escribir sobre la Juegoteca no es sin mencionar todo este recorrido

Para comprender parte de la riqueza que la Juegoteca brinda, consideramos necesario hacer referencia a las características sociodemográficas y económicas de la población que asiste al centro.



Nuestro Centro de Salud

El Centro de Salud Nº10, dependiente del área programática del Hospital Penna, está localizado en el Barrio de Constitución. La población que concurre proviene tanto de su área de responsabilidad como de zonas aledañas, al no circunscribirse la atención únicamente a dicha área.

Se estima que dentro de la población que concurre, el 50% puede ser considerado de riesgo por vivir en condiciones socioeconómicas, ambientales y sanitarias deficientes. La zona se caracteriza por tener casas bajas, inquilinatos, viviendas colectivas y hoteles, por lo que las condiciones habitacionales de la población son precarias y con frecuente hacinamiento de personas en espacios reducidos. En casos extremos, muchos de los hoteles no permiten el ingreso de las familias que tienen niños pequeños, así como el ruido en espacios compartidos; como consecuencia de esto, se restringe mucho lo que se puede hacer, y los más afectados por esta situación son los niños, puesto que en varias ocasiones no se les permite jugar (o hacer bochinche) en sus propias viviendas.

Es en este contexto que la Juegoteca aparece como una apuesta, un espacio privilegiado, que se ofrece a cada niño para el despliegue de su juego, de su sí mismo. En otras palabras, un espacio para bochinchear.

Adentrándonos en su historia y antecedentes, en el año 1997 comienza a funcionar en el Centro de Salud la Juegoteca “Bochinche”, la misma se llevó a cabo durante muchos años dentro del centro y luego se convirtió en una Juegoteca Ambulante que circulaba por diferentes lugares del Barrio. El dispositivo dejó de funcionar alrededor del año 2001 por motivos que desconocemos.

Es en el año 2010, que un grupo de Psicólogas y Psicopedagogas del CeSAC n° 10 arma un nuevo Proyecto –enmarcado ya en el programa “Juegotecas en Salud”- para retomar este espacio dentro del Centro, bajo el nombre “Bochinche, otra vez”. Un nombre que fue heredado y que permitió mantener cierta trayectoria, pero que se resignificó. El “Otra vez” incluido hoy en día refiere una nueva apuesta, porque a pesar de todo ésta sigue estando, bajo otra modalidad, con otros profesionales, en otro espacio, pero siguiendo la propuesta inicial: habilitar espacios para la construcción y el desarrollo del juego, y en consecuencia, de la subjetividad infantil.



Nuestra Juegoteca

El espacio de Juegoteca vuelve a ponerse en movimiento, pero bajo una única consigna: jugar por jugar, jugar libremente. En relación a esto, tomamos los aportes de Grillo y otros al pensar el dispositivo como “un lugar donde los niños jueguen libremente con todo el sentido que esto tiene para ellos, y, por otro lado, como forma de revalorizar el juego en la infancia, mostrando a los adultos la importancia que, para el Centro, tiene el juego” (pag. 113). Se trataría, entonces, de otorgar un espacio y un tiempo de actividad lúdica libre, donde los niños puedan desplegar, por el simple placer de juego, toda la riqueza, y la seriedad, que esta actividad tiene para ellos, “el niño toma muy en serio su juego” (Freud, 1907)

Dentro del espacio de la Juegoteca se desarrolla también un espacio especial para los más chiquitos, la beboteca. “Bochincheritos” comenzó a funcionar al poco tiempo de iniciado nuestro recorrido por la Juegoteca, es un espacio pensado para que las familias puedan ir a jugar con los más pequeños. Pensando el juego como elemento esencial para la constitución del sujeto y el mundo del bebé, entonces se trataría de ofertar un lugar donde fomentar el juego desde la más temprana infancia, el encuentro con los padres, y así la instalación de una zona intermedia, transicional que le permite al niño crear su mundo.

Existe una rutina que se repite todos los miércoles. Previo a la apertura de la Juegoteca, bajamos juegos y juguetes al SUM, acomodamos el espacio y ubicamos los juguetes de acuerdo a sus características generando y ofreciendo diversos espacios dentro de un mismo lugar. Pasada esta instancia de organización y acomodación es cuando la verdadera diversión empieza. Las puertas del SUM se abren de par en par y los niños ingresan al salón. De aquí en más ya nada es rutinario puesto que jamás se vuelve a repetir una misma situación, por más que concurran los mismos niños y jueguen con los mismos juguetes. Lo novedoso siempre surge. Cada encuentro abarca cientos de encuentros: niños con adultos, niños con otros niños, niños y juguetes. Se puede observar cada miércoles la diversión y la alegría que genera el espacio en los niños. Cada encuentro se cierra con la promesa de que la próxima semana volveremos a estar en el mismo horario y en el mismo lugar.

La Juegoteca es testigo y cómplice de múltiples mundos fantasiosos. En cada rincón del espacio suceden hechos maravillosos y al finalizar la Juegoteca cada una de nosotras se lleva historias para contar en el equipo, rescatando como punto en común la convicción de que el juego es salud.

Ahora bien, ¿cuál es la noción de juego que define nuestra mirada? ¿Por qué entendemos al juego como salud? Dice Raquel Gerber “el juego hace al niño; donde hay juego, hay niño” (2005, pág. 100). Por lo cual entendemos al juego como una cualidad esencial que se impone y de la cual no puede expropiarse a un niño, ya que la infancia, en términos de salud,  es impensada sin una referencia al juego, “es como si el juego diera voz a esa etapa de la vida que es la infancia” (Rozenthal 2005, pag. 24).

Siguiendo a Winnicott, el juego es una cualidad del aparato psíquico sano, ya que “lo universal es el juego, y corresponde a la salud” (Winnicott, 1971). Sólo a partir del jugar una persona puede ser creativa, en el sentido que el autor le otorga a la creatividad: el despliegue de lo más personal, de lo que es indudablemente uno mismo, lo más propio y oculto de cada persona. Dice "El juego es una experiencia siempre creadora y es una experiencia en el continuo espacio-tiempo, una forma básica de vida" (Winnicott, 1971).

La Juegoteca está en consonancia con los lineamientos de Atención Primaria de la Salud, reflejando algunos de sus componentes, como ser la participación, la interdisciplina, la promoción de la salud, la prevención inespecífica, la accesibilidad y la equidad. Es un espacio que puede ser una puerta de entrada al sistema de Salud, y que permite armar lazo con la comunidad. Además, rescata el derecho del niño a jugar, a disfrutar de su tiempo libre, a participar en actividades culturales, y a ser escuchado, derechos valorizados en la Convención Internacional de los Derechos de Niños.

Compartimos los aportes del equipo del CeSAC N° 8, también perteneciente al área programática del Hospital Penna, quienes al referirse acerca de la importancia de estos espacios de juego en lugares cercanos a la población y principalmente en Centro de Salud, refieren que “en la población infantil de este lugar, la carencia se refleja en las dificultades de los adultos de sancionar la infancia en tanto lugar diferenciado, (…) sujeto en formación” (Grillo y Otros, pág. 113). La cotidianeidad en la que viven y diferentes situaciones que deben atravesar llevan a ubicarlos en un lugar particular dentro de la estructura familiar, suponiéndole funciones que exceden a sus posibilidades, a lo que es propio de su posición particular de “ser niño”.



Conclusiones

Sin dar por sentado que la experiencia de juego logra formar parte de la vida de los niños con los que trabajamos confiamos en que este dispositivo nos permite acercarlos a ello, defendiendo desde nuestro lugar, y como agentes de salud, el derecho a jugar como derecho fundamental del niño y como elemento principal de esta etapa de la vida.

Por todo lo desarrollado anteriormente, consideramos fundamental revalorizar nuestro rol en el espacio y nuestra responsabilidad en todos los espacios de los cuales participemos. Tanto dentro como fuera de nuestro ejercicio profesional debemos transmitir el respeto y la protección del lugar de la infancia y su actividad, que sin dudas es el juego.

Habilitar a los  padres a jugar junto a ellos, sin dejar de lado la importancia del juego en todas las edades. La propia posibilidad lúdica y creativa de los adultos que forman parte del espacio se convierte en la herramienta principal en tanto “…los chicos juegan con mayor facilidad cuando la otra persona puede y sabe ser juguetona” (Winnicott,1971 p. 69)



BIBLIOGRAFÍA

Freud “El creador literario y el fantaseo”. Tomo IX. Amorrortu. 1907

Griilo, M. R.; Tombetta, P.; Maravini, M. Hacia la creación de un lugar para los niños: la juegoteca. Psicoanálisis y el Hospital N° 10

Proyecto Juegoteca “Bochinche otra vez”. Equipo de Psicología del CeSAC Nº 10. 2010

Proyecto “Abramos las puertas para ir a jugar. Juegoteca Comunitaria Bochinche”. CeSAC Nº 10. 2000

Rozenthal, A. y Otros “El juego historia de chicos. Función y eficacia del juego en la cura”. Ed. Noveduc. 2005

Winnicott, D.W. (1971). Realidad y Juego. Barcelona: Gedisa, 1997





EL JUEGO COMO ARTICULADOR Briglia, Julieta (Lic. en Terapia Ocupacional); Fuertes, Laura (Lic. Kinesióloga fisiatra); Nowotny, Alexia (...